Las patologías a tratar en adolescentes son parecidas a las que se tratan en adultos, ansiedad, depresión, miedos, fobias, celos, depresión, fracaso académico, problemas de alimentación, problemas de sueño (pesadillas), problemas de autoestima, etc. Se diferencian de las patologías en adultos en la sintomatología (se da a otros niveles) y en la expresión de esos síntomas, totalmente diferente a como lo puede expresar un adulto. En estos casos los tratamientos siempre son adaptados a cómo vive el menor esta circunstancia, a su edad y desarrollo.
En general, la sociedad, es consciente de que problemas como la anorexia o la bulimia son muy comunes actualmente, pero existen otras conductas relacionadas con la alimentación que también pueden convertirse en un problema aunque no sean tan graves.
Uno de los casos más comunes dentro de esta problemática es comer con ansiedad, aunque pocos lo consideren un problema. En estos casos las personas tienden a llevar una alimentación poco equilibrada, alta en grasas y azúcares.